La unificación ibérica
Este volumen aborda la historia del agua en la Península Ibérica de una forma novedosa, vinculándola al actual debate internacional sobre la crisis del agua y las soluciones para superar la falta de agua en el Mediterráneo.
¿Qué dispositivos hídricos se encontraron? ¿Cuáles eran los modelos de estos dispositivos? ¿Cómo estaban distribuidos en las villas y recintos monásticos? ¿Qué impacto tuvieron los conocimientos teóricos hidráulicos en estos sistemas de agua y cómo pudieron influir estos sistemas en la tecnología hidráulica? Guiado por estas preguntas, este libro recorre la historia del agua en las ciudades más significativas, el papel del agua en la transformación del paisaje, los sistemas de riego y los dispositivos hidráulicos en jardines y villas y, por último, los antecedentes teóricos y didácticos sobre la gestión del agua y la hidráulica en la Península Ibérica entre los siglos XVI y XIX.
La historiografía sobre la gestión del agua en el territorio que hoy es España ha destacado el papel de la región como mediadora entre los maestros islámicos del agua y el mundo cristiano. La historia del agua en Portugal es menos conocida, y se ha dado por sentado que es similar a la de su vecino. Este libro compara dos países que tienen las mismas raíces históricas y, por lo tanto, muchas historias similares, pero al mismo tiempo ofrece una visión de aspectos particulares de cada país.
¿Por qué terminó la Unión Ibérica?
Uso del suelo en la cuenca, Eutrofización, Modificación del caudal, Metales pesados, Degradación hidromorfológica, Impacto de las especies exóticas, Contaminación por compuestos orgánicos (por ejemplo, DDT, PCB), Alteración del hábitat ribereño
2.02 Breve descripción: Se realiza un muestreo multihábitat diseñado para el muestreo de los principales hábitats (sedimentos y macrófitos sumergidos) en proporción a su presencia dentro de un tramo de muestreo. Una muestra consta de 6 “unidades de muestreo” tomadas de los principales tipos de hábitat en el lugar de muestreo con una proporción de al menos el 5 % de cobertura. En el caso de los sedimentos, una “unidad de muestreo” es un muestreo estacionario realizado mediante la colocación de la red y la perturbación del sustrato en un área cuadrática que equivale al tamaño del marco aguas arriba de la red (0,3 x 0,3 m). Los sedimentos deben ser perturbados hasta una profundidad de 15-20 cm (cuando sea posible) dependiendo de la compacidad del sustrato. Para los macrófitos sumergidos, una “unidad de muestreo” es un muestreo estacionario que se realiza colocando la caja de Downing (6 l) y cerrándola en la columna de agua que contiene los macrófitos.
España
Federalismo ibérico, panibérico o simplemente iberismo (aragonés, vasco, gallego, portugués y español: Iberismo; asturiano: Iberismu; catalán y occitano: Iberisme) son los nombres de la ideología panacionalista que apoya la unificación de todos los territorios de la Península Ibérica. Se utiliza sobre todo para referirse a Portugal y España, pero también puede abarcar Andorra, Gibraltar y territorios de Francia como la Cataluña Norte o el País Vasco francés.
La lengua portuguesa y las lenguas gallegas evolucionaron a partir del gallego-portugués medieval cuando el Condado de Portugal se separó del Reino de León convirtiéndose en el Reino de Portugal. Por otro lado, la lengua gallega se ha visto cada vez más influenciada por el castellano desde la incorporación de Galicia a la Corona de Castilla como Reino dependiente de León.
Las identidades de la España moderna y de Portugal se desarrollaron durante la experiencia de la Reconquista[cita requerida] En 1512, Fernando II de Aragón conquistó el Reino de Navarra poniendo los territorios de lo que sería la España moderna bajo un gobernante común. Sin embargo, Portugal siguió siendo un reino independiente que competía con España (Castilla) en la expansión colonial. Para evitar el conflicto, el Tratado de Tordesillas dividió el mundo en hemisferios de influencia portuguesa y castellana.
Bandera de la Federación Ibérica
El Partido Comunista Portugués (PCP) y el Partido Comunista de España (PCE) evolucionaron de la divergencia a la convergencia ante la integración europea entre 1985 y 1994. Ambos partidos partían de posiciones opuestas desde los tiempos de la lucha contra las dictaduras de Salazar y Franco, cuando el PCP se alineó con la línea ortodoxa de Moscú mientras que el PCE optó por la heterodoxia eurocomunista. Las tesis de Gorbachov sobre la “casa común europea”, la perestroika, la disolución de la Unión Soviética y el fin de la Guerra Fría obligaron a los dos partidos comunistas ibéricos a posicionarse ante cambios vertiginosos que también tuvieron su traducción en la construcción europea. Los cambios en las relaciones internacionales, la forma que tomó la construcción europea con el Tratado de Maastricht de 1992, y el giro anticapitalista y tercermundista a la izquierda que dio el PCE a partir de 1988 facilitaron una convergencia con el PCP que se tradujo en una cooperación entre ambos en el Parlamento Europeo. Este artículo analiza la evolución de las posiciones ideológicas y las decisiones tácticas de los dos principales partidos comunistas ibéricos a través de documentos, prensa, discursos, declaraciones, debates parlamentarios de ambas organizaciones y, cuando es posible, sus archivos históricos.