Jamón ibérico cerca de mí
Cuando se trata de comida española, no hay nada tan emblemático como el famoso jamón ibérico. Simplemente, ¿qué puede haber mejor que un plato de jamón con queso, aceitunas y un vaso de vino tinto, mientras se ve la puesta de sol?
La conexión española con el cerdo se remonta a un pasado rural. Tan importante era el cerdo en las comunidades rurales, que podía determinar literalmente el destino de las familias campesinas pobres. Una vez engordado el cerdo, no se desperdiciaba nada. Y como no se podía desperdiciar nada, tenía que haber una forma de preservar la carne de la ruina y así, por necesidad, comenzó el proceso de curado de jamones en el que todavía hoy se curan en gran parte. Cada vez que se ve un jamón colgado en un supermercado o en un bar, es humillante pensar que son como son gracias a la voluntad de supervivencia de la humanidad.
España produce unos 40 millones de jamones al año, pero sólo hay dos tipos de jamones curados: El jamón serrano, traducido literalmente como “jamón de sierra” (la mayoría de los cuales proceden de cerdos de raza autóctona) y el jamón ibérico, de cerdos de la dehesa. La dehesa cubría casi el 90% del territorio español, pero en la actualidad sólo se conserva en las regiones de Andalucía, Extremadura y Salamanca.
Jamón ibérico frente a jamón serrano
La variedad de jamones españoles es grande y el rango de precios también; en muchos casos se convertirá en una decisión compleja, sobre todo si es tu primera vez. A través de este artículo compartimos una completa guía de compra para ayudarte a tomar la decisión correcta mientras te introduces en el conocimiento de esta maravilla de la gastronomía española.
Lo primero que debes tener en cuenta es qué tipo de jamón te puede gustar más o se adapta mejor a tus necesidades. En España encontramos básicamente dos razas: Duroc e Ibérico. Los tipos de jamón vienen determinados principalmente por las diferentes combinaciones entre ellas:
Todas las piezas de “Pata Negra” deben llevar una etiqueta negra alrededor del tobillo con un código de barras, a través del cual podemos comprobar su trazabilidad. Los cerdos se crían en libertad en la dehesa y la base de su alimentación es la bellota.
Jamón de raza ibérica, que han sido cruzados en diferentes proporciones con raza Duroc. Criados también en libertad en la Dehesa, su alimentación principal es la bellota. Suelen ser piezas más grandes que el “Pata Negra”, ya que la raza Duroc produce cerdos de mayor tamaño.
Jamón serrano cómo comer
La principal diferencia entre ambos en la raza y el entorno de cría del animal. El jamón ibérico se produce únicamente con una raza de cerdos negros que tiene la particularidad de acumular grasa en varias zonas de su cuerpo. El cerdo ibérico es una especie mediterránea que vive en libertad en las dehesas durante el periodo de engorde y se alimenta sólo de productos naturales. El jamón ibérico tiene un periodo de concepción más largo porque el periodo de engorde es mayor y el tiempo de curación varía entre 14 y 36 meses.
Presenta un aroma y una textura únicos, que se distingue de los demás por su excelente calidad. Sólo obtiene la denominación de ibérico, el daño que proviene de la raza ibérica y que llevan una norma de alimentación natural.
El jamón serrano es el más consumido en España, ya que es más fácil de encontrar y también más económico. El paladar de este jamón es más suave porque la cantidad de grasa es menor y su alimentación se basa en ración de cereales. La raza de los animales es variada y el diferencial de este jamón es la forma de curarlo. Para obtener la denominación de jamón serrano, la curación debe realizarse en el clima seco y frío de la sierra.
Jamón ibérico costco
¿Qué diferencia real hay entre ambos y de dónde proceden esas diferencias? ¿Es el serrano una raza especial? ¿Se alimenta a los cerdos de forma diferente para los dos tipos de jamón español? ¿Por qué elegir uno en lugar de otro?
Aunque pueda parecer que estamos hablando de dos productos muy similares, sobre todo a primera vista, en realidad hay una gran diferencia entre el jamón ibérico y el serrano, ya que ambos tienen aromas, sabores, colores y texturas muy diferentes.
En definitiva, estas propiedades organolépticas a las que nos referimos son el aroma, sabor, color y textura del jamón español. A partir de ellas, podemos establecer algunas de las diferencias más importantes entre el jamón ibérico y el serrano.
Por su parte, el equivalente serrano tiende a tener un sabor más salado. Por último, el Serrano tiende a una textura menos jugosa debido a una menor proporción de grasa intramuscular, y el Ibérico tiende a una textura más rugosa.
El Ibérico suele ser un jamón más largo, con forma alargada y hueso más estrecho, y suele terminar en una pezuña negra. Si no puede distinguirlo mirando directamente el jamón, fíjese en el precio: El Ibérico es el más caro de los dos tipos, y su mayor calidad se refleja en un precio más elevado.