Diferencia entre jamon iberico y paleta iberica
Paletilla ibérica
El Jamón Ibérico es la pata trasera del cerdo y es más grande que la Paleta Ibérica. Como el jamón es más grande, cambia la distribución y la calidad de la carne - en comparación con la paleta ibérica, el jamón tiene un menor contenido de grasa intermuscular.
El jamón ibérico, debido a su tamaño, tiene un proceso de curación más largo. Esto madura más la carne y da al jamón un sabor más intrincado y matizado por el que es famoso. El Jamón Ibérico tiene una sensación más profunda y rica, ya que los sabores de la carne han tenido tiempo de suavizarse y entremezclarse, mientras que la paleta "más joven" es rica e intensa al paladar. Muchos prefieren esta carne delicada y aprecian su complejidad.
En cuanto a la carne, el jamón ibérico es más oscuro. Comparado con la Paleta Ibérica, el Jamón Ibérico es menos huesudo y tiene un mayor rendimiento de carne. Debido al largo proceso de elaboración, el Jamón es el más caro de los dos.
La paleta es la pata delantera del cerdo, más corta y ligera que el jamón. Esto significa que la paleta es más pequeña y que hay una diferencia en la distribución de la grasa y la carne. La paleta se reconoce por la forma característica del omóplato o paletilla, que le da su nombre: Paleta Ibérica.
Jamón ibérico
El jamón serrano se obtiene de cerdos de raza blanca. Para diferenciarlo aún más de cualquier jamón ibérico, recuerde que el cerdo blanco no se alimenta de bellotas. La dieta de estos animales se basa principalmente en pienso y, en ocasiones, castañas.
Existe una arraigada costumbre de curar los jamones en zonas altas de la sierra, lugares con bajas temperaturas donde se facilita la curación, de ahí que a este producto se le denomine "serrano". Para distinguirlo del jamón de York o jamón cocido, cualquier jamón curado se denomina serrano, especialmente en algunos países europeos; lo que puede dar lugar a la típica confusión del jamón ibérico con el jamón serrano.
Según las denominaciones del artículo 21 del Real Decreto 474/2014, de 13 de junio, sobre normas de calidad de los productos cárnicos, el jamón serrano curado tiene tres denominaciones, que se diferencian por el tiempo de curación:
La pezuña del jamón serrano es blanca, y el tono del jamón ya loncheado es más rosado que el ibérico y menos brillante, ya que el jamón serrano no tiene grasa infiltrada como el ibérico.
Jamón serrano
La Paleta Ibérica es de menor tamaño que el Jamón Ibérico, y procede de las pezuñas delanteras del cerdo Torbiscal 100% ibérico, que ha sido criado en libertad en encinares del Valle de Los Pedroches. Desvela en su textura y sabor las mismas virtudes que el Jamón Ibérico. Sorprende al paladar la gran cantidad de matices aromáticos que revela su brillante grasa al fundirse.
MIO es el cuidado de una especie única que podría desaparecer si no se resalta su importancia. La variedad Torbiscal pura ibérica tiene en algunas de sus pezuñas porcinas, una línea blanca, una despigmentación. Esta característica trajo un rechazo de la gente, que el MIO ha puesto de relieve haciendo de esta característica como algo único y especial. Queremos premiar su confianza con esta diferencia dándole la oportunidad de disfrutar de un fin de semana en el encinar si tiene la suerte de recibir un jamón o paleta con la línea blanca en la pezuña negra, una experiencia única para un producto único.
Diferencia entre jamon iberico y paleta iberica del momento
Voy a explicar las diferencias y similitudes entre una paleta de bellota 100% ibérica, también llamada "Pata Negra" y una paleta de bellota 50% ibérica. Ambas son de muy alta calidad, pero la diferencia no está sólo en el precio. En nuestra tienda online puedes comprar la paleta ibérica de bellota que elijas con total garantía y puedes ponerte en contacto con nosotros para que te asesoremos personalmente.
Lo primero que debes saber es que todas las paletas de ibérico de bellota 50% raza ibérica por ley deben llevar una brida roja (una etiqueta alrededor de la pezuña que certifica y garantiza la calidad del producto).
Estas piezas, que se obtienen de las patas delanteras del cerdo ibérico, son más pequeñas que los jamones (patas traseras), y su peso no puede ser inferior a 4 kg, aunque siempre recomendamos comprar una pieza de entre 5 kg y 6 kg, ya que tendrá una curación más prolongada y por tanto obtendrá una paleta ibérica de bellota más equilibrada.
Los cerdos se crían en total libertad durante toda su vida, pastando en las dehesas y alimentándose de bellotas y hierbas silvestres durante la época de montanera, que dura de octubre a marzo. El resto del año, cuando no hay bellotas, se alimentan de pienso.