Por qué casi desaparece el lince iberico

Cuántos linces ibéricos quedan en el mundo 2021
El lince ibérico (Lynx pardinus) es una especie de gato salvaje endémica de la Península Ibérica, en el suroeste de Europa. Está catalogado como En Peligro en la Lista Roja de la UICN[2] En el siglo XX, la población del lince ibérico había disminuido a causa de la caza excesiva, la caza furtiva, la fragmentación de los hábitats adecuados y el descenso de la población de su principal especie de presa, el conejo europeo (Oryctolagus cuniculus), causado por la mixomatosis y la enfermedad hemorrágica del conejo[3][4].
A principios del siglo XXI, el lince ibérico estaba al borde de la extinción, ya que en 2002 sólo sobrevivían 94 individuos en dos subpoblaciones aisladas en Andalucía. Desde entonces se han aplicado medidas de conservación, que incluyen la mejora del hábitat, la repoblación de conejos, la translocación, la reintroducción y el seguimiento de los linces ibéricos. En 2012, la población había aumentado a 326 individuos,[6] a 855 en 2020,[7] y a 1.111 en 2021[8].
Felis pardina fue el nombre científico propuesto por Coenraad Jacob Temminck en 1827, quien describió pieles de linces ibéricos abatidos en la zona del río Tajo, en Portugal, que se comercializaban en París y Londres[9].
¿Por qué se extingue el lince ibérico?
El lince ibérico está al borde de la extinción debido a una combinación de amenazas que incluyen la disminución radical de los conejos, la principal presa del lince; una grave reducción del hábitat; la captura en trampas colocadas para los conejos; las muertes accidentales causadas por el exceso de velocidad de los vehículos en la red de carreteras en expansión, ...
¿Qué está matando al lince ibérico?
Los accidentes de tráfico son la principal causa de mortalidad del lince ibérico y representan una importante amenaza para las ya reducidas poblaciones de la especie. Este es el primer lince muerto por un accidente de este tipo este año; sin embargo, el año pasado murieron 14 linces por accidentes de tráfico.
Datos interesantes del lince ibérico
El lince ibérico (Lynx Pardinus) es un gato salvaje que se encuentra en la Península Ibérica, en el suroeste de Europa, y más concretamente aquí en España. Actualmente está catalogado como en peligro de extinción en la lista roja de la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza), que es el inventario más completo del mundo sobre la conservación global de las especies biológicas. En los últimos años, la categoría de amenaza del lince ibérico ha cambiado de "En peligro crítico" a "En peligro". A pesar de ello, el lince ibérico sigue siendo el felino más amenazado del mundo.
El lince ibérico es una de las especies más esquivas del mundo, de hecho muy pocas personas han visto alguna vez un lince ibérico en libertad. Para entender mejor a este misterioso felino, vamos a explicar sus rasgos físicos y de comportamiento más llamativos:
Como ya hemos dicho, el lince ibérico es endémico de la Península Ibérica, por lo que su población salvaje se limita a esta zona. Su superficie ha disminuido en un 99% en los últimos 50 años, ya que si en los años 50 ocupaba unas 5.800.000 hectáreas cuadradas, en el año 2000 sólo ocupa unas 35.000.
Qué pasaría si el lince ibérico se extinguiera
Al ser raro y exclusivo de la Península Ibérica, el lince ibérico es uno de los felinos salvajes más amenazados del mundo y el carnívoro más amenazado de Europa, con menos de mil animales en libertad, la mayoría de ellos en España. En Portugal, donde existe una única pero muy importante población reproductora en libertad, en el Valle del Guadiana, la especie sigue en peligro crítico.
El lince ibérico tiene unas características muy particulares que lo distinguen de otros felinos. A saber, sus pelos negros, rígidos y en forma de cepillo, en la punta de las orejas, su cola corta con la punta negra y los largos pelos blancos y negros del hocico, que parecen barbas y crecen con la edad.
Su pelaje amarillo-marrón con manchas negras le permite camuflarse maravillosamente entre la vegetación del paisaje mediterráneo, donde vive, y cada individuo tiene un patrón de pelaje único, que permite distinguirlo de todos los demás de su especie.
Fueron varias las causas que provocaron el rápido declive de las poblaciones de lince ibérico en las últimas décadas. Sin embargo, la casi desaparición de este carismático felino se debió fundamentalmente a la regresión de su principal presa, el conejo de monte, así como a la pérdida y deterioro de su hábitat. Actualmente se está recuperando y ampliando su territorio, como resultado de una combinación de esfuerzos de conservación in situ, y un programa de cría en cautividad con reintroducción en la naturaleza, la muerte no natural por atropello se suma a sus principales causas de mortalidad.
Gráfico de la población del lince ibérico
Esta publicación describe la situación muy urgente del lince ibérico. Su posición en la lista roja de la UICN como en peligro crítico indica que las posibilidades de extinción son bastante reales. La extinción del lince significaría la primera extinción de un gran felino en Europa desde la desaparición del tigre de dientes de sable hace aproximadamente 10.000 años. Muchos de los peligros a los que se enfrentan los linces tienen una estrecha relación con las actividades humanas (desarrollo de infraestructuras, tráfico y expansión de la agricultura). La población restante se concentra en dos zonas muy pequeñas, lo que aumenta enormemente la vulnerabilidad de la población. Además, el cambio climático parece tener consecuencias definitivas para la Península Ibérica. Los veranos más calurosos y secos que se esperan en un futuro muy próximo, con un aumento de la incidencia de los incendios forestales y posiblemente menos presas para los linces, harán que su situación sea aún más vulnerable.